El FEAG (Fondo Europeo de Adaptación a la Globalización) es un instrumento financiero relativamente poco conocido, que tiene como objetivo ayudar a paliar los efectos socioeconómicos de los despidos masivos en zonas geográficas concretas, como consecuencia de crisis del sector o empresa, o de la competencia o deslocalización de las actividades. La Comisión Europea ha publicado su informe de resultados de dicho Fondo en el periodo 2013-2014. Algunos datos que aparecen en dicho informe son:
- Aumentan el número de sectores que son “víctimas” de la globalización, y por tanto se ven abocados a los despidos masivos y a solicitar este tipo de ayudas.
- Sin embargo, sólo 13 de los 28 Estados Miembros han solicitado este tipo de ayudas.
- El número de trabajadores despedidos en cada proceso, que después fue objeto de ayuda por el FEAG, es muy variable, yendo desde los 300 de la “Tabacalera” austriaca, a los más de 5.000 en el caso de la reestructuración de Air France, o los 4500 en el caso de Nokia.
- En España, la Comunidad Valenciana ha sido la principal beneficiaria de este Fondo, para atender las crisis de sus industrias de la construcción, metal y textil.
- En el caso de Aragón, se puso en marcha un fondo FEAG para atender la crisis procedente del sector de restauración y comercio al por menor, crisis cuantificada en 280 trabajadores despedidos; en este caso, la ayuda comunitaria fue de 3.429 € por trabajador.
El dinero se ha destinado sobre todo a:
- ayuda intensiva y personalizada para la búsqueda de empleo y la orientación profesional;
- diversas actuaciones de formación profesional y medidas de cualificación y de reciclaje profesional;
- diversas asignaciones e incentivos financieros temporales concedidos durante el periodo de ejecución de las medidas activas de apoyo, y hasta el momento de la reinserción laboral efectiva;
- tutoría durante la fase inicial en el nuevo empleo;
- otros tipos de actividades, como la promoción del emprendimiento y de la creación de empresas, y la concesión de incentivos únicos para el empleo y la contratación.
El informe destaca que, al finalizar el periodo estudiado, el 45% de los trabajadores beneficiarios había encontrado un empleo o iniciado una actividad por su cuenta, destacando la validez de las medidas individualizadas y personalizadas, frente a las políticas “standard” que se aplican desde las políticas nacionales y el propio Fondo Social Europeo.
El informe completo (en castellano) está disponible en el siguiente enlace.